Las madres que amamantan requieren el apoyo de su pareja, su familia, el lugar de trabajo, el personal de salud y la comunidad en general. Es importante considerar algunos puntos importantes:
* Acompañamiento de la familia. Constituyen la red de apoyo más inmediata y continua en el proceso de lactancia, interviniendo en el cuidado directo del bebé, motivando a la madre en la rutina diaria del hogar, así como en la atención y los cuidados que requiere el propio amamantamiento.
* Madres trabajadoras. Las mujeres que amamantan y trabajan fuera del hogar necesitan apoyo para practicar una lactancia materna óptima. En estos casos, se les debe brindar las condiciones necesarias para extraer y conservar la leche materna, además de vincularlas en encuentros de formación para el cuidado, crianza y para favorecer un adecuado crecimiento y desarrollo de los niños.
* Otros sistemas de apoyo. Son constituidos por las mismas madres entre sí, los grupos de apoyo a la lactancia, el personal de salud y las mujeres gestantes; estos facilitan la adaptación a los cambios propios de la maternidad y la lactancia, así como la socialización de experiencias y la resolución de dudas oportunamente con el fin de evitar el abandono precoz de la lactancia materna.