Recientemente el señor Luis Fernando Botero, especialista en servicio al cliente y asesor empresarial, escribió en su blog, una muy grata reseña donde relata su experiencia como usuario de nuestra Clínica. Compartimos sus bellas palabras, que nos motivan a continuar trabajando con el corazón:
“Desde el desayuno se sabe cómo será el almuerzo
Cuando usted llega a un sitio -almacén, supermercado, taller, centro comercial, gimnasio, residencia, clínica u hospital- y se sorprende con la simpatía, calidez, expresiones de felicidad y tranquilidad en el rostro de quienes trabajan o viven allí, sabe que ese será un sitio al que regresará con gusto.
La semana anterior debimos ir, mi esposa y yo, a la Clínica Cardio VID -antes Clínica Cardiovascular- de Medellín. Debíamos ingresar por Urgencias y allí nos atendería el médico que nos había remitido para unos exámenes a fin de determinar si mi esposa debía permanecer hospitalizada, lo cual, al final sucedió. Desde el inicio sabíamos que nos encontrábamos en una clínica diferente, gente amable por todas partes, el portero de urgencias nos saludó con una sonrisa natural que denotaba alegría, satisfacción plena con su trabajo, igual las enfermeras y el equipo médico que iba llegando a revisar a su paciente. Todos con una expresión de felicidad con su trabajo, con su clínica. La impresión para el visitante es que, esta Clínica tiene una visión absolutamente cliente céntrica y todos los trabajadores son responsables, sin importar su cargo, de sorprender al visitante para invitarlo a permanecer y regresar.
Cada estación de viaje del cliente
Es evidente que todos los puntos críticos de contacto en esta Clínica han sido analizados y concebidos para garantizar que la relación entre cliente -paciente y/o acompañante(s)- y Clínica, generen la misma impresión de cercanía, facilidad, disposición para servir y colaborar, veamos:
Urgencias. El paciente que llega es recibido con excelente disposición, hay velocidad en los trámites, rapidez en las decisiones, pero no se percibe desorden, más bien se siente, interés por cada paciente. Evidentemente, hay desorden en el sentido de que, hay sillas de ruedas por todas partes, camillas que van y vienen, pero siempre hay una persona, amable, interesada en el paciente para colaborarle. Se percibe un clima propio de un área de urgencias hospitalarias, una cantidad de gente esperando, pero se ve el movimiento y por donde uno pasa, hay algún médico o auxiliar conversando con un paciente y buscando la forma de ayudarle
Ingreso. Rápido, pocas firmas, con personas amables que facilitan todo el proceso.
Habitaciones. Limpias, ordenadas, agradables, con una energía que atrae, muebles cómodos. Hace tiempo no dormía en una clínica y la primera noche lo hice por diez horas sin despertarme, con eso puedo afirmar que es cómodo el sitio para dormir los acompañantes.
Personal de atención al paciente. Es lo mejor, su saludo expresa su satisfacción en el trabajo, cercanía con el paciente, nada de señor o señora, a cada uno lo llaman por su nombre, son rápidos en las respuestas, diligentes en las soluciones. En los momentos de tensión, se percibe un sólido trabajo en equipo. Sonrisa espontánea, conversación que busca conectar con el paciente y sorprenderlo, explicación clara de cada acción, atención a las objeciones del paciente y discusión tranquila que denota interés y no autoridad.
Médicos. Una sola palabra para definir el grupo de médicos que atienden al paciente: equipo. Todo lo que dice uno lo saben los demás para decidir y de esa manera el paciente percibe que hay una sola mirada sobre él y así, se evitan decisiones encontradas cuyo único afectado sea el paciente. Amables, simpáticos, cercanos y todo en el contexto de una sola definición para su capacidad profesional: científicos.
Entorno. El paciente se siente en una finca. Desde la habitación en que estamos, divisamos todo el tiempo: pájaros, cabras, burros, árboles de mango. Una vista relajante y con una brisa que estremece las ramas de los árboles que nos rodean.
En resumen, sentimos un liderazgo alrededor del cliente, todos los funcionarios en contacto con el paciente y sus acompañantes, percibe que detrás de la actitud de cada persona, hay una definición clara del perfil, las habilidades y competencias para pertenecer a este grupo humano sin igual, único y sorprendente. Sin dudarlo, al final de nuestra estadía en la Clínica Cardio VID, decidimos que, en adelante, este será el único sitio donde queremos regresar para que los médicos atiendan nuestros requerimientos.
Rigor científico, comunicación directa y mirada única del paciente, instalaciones hermosas y con una energía que atrapa, y equipo humano comprometido con sus visitantes sean pacientes o acompañantes, soportan esta decisión.”
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